Antofagasta de la Sierra se encuentra a 3373msnm, en plena cordillera de los Andes. A partir del año 1000dC se asentó allí la denominada cultura Belén y luego en 1480 pasó a formar parte del imperio Inca. En 1535 fue conquistada por los españoles al mando de Diego de Almagro.
Es importante llevar ropa de abrigo (todo el año, aún en verano), calzado adecuado, gorra y anteojos de sol, protector solar y humectante para la piel (el clima es tan seco que se te agrietan las manos y labios y, en mi caso, terminaba sangrando sin darme cuenta – muy poco, tampoco voy a exagerar). Ojo con la altísima radiación ultravioleta.
Aquí les paso más datos de la folletería que obtuve en Antofagasta de la Sierra y Antofalla y que no se consigue completa online ni en la Casa de la Provincia de Catamarca:
A todos los teléfonos agreguen el prefijo de Argentina si ya no lo tienen +54.
Información turística de Antofagasta: 3834-593927/ +5438344550306 / +543834594458
Información turística de El Peñón: 3834-594309
ANTOFAGASTA
Sitios de interés: Confluencia (sitio de altos farallones con grabados, 3km), El coiparcito (antiguo pucará inca, 3km), Laguna colorada (4km), La alumbrera (asentamiento inca con una muralla en forma de U, 6km), Peñas Coloradas (farallones grabados, 6km), Antofagasta y Alumbrera (volcanes de 250m que se pueden ascender, 8km), Antofagasta y Escondida (lagunas, 8km), Punta de la Peña (petroglifos, centro de interpretación, 8km), La Cueva de Cacao (sitio arqueológico y palentológico, 20km), Real Grande (cañón con cuevas, 24km), Los Nacimientos (pueblo milenario, 35km). Pasando Peñas Coloradas están las cantera de mármol ónix. La Cueva de Cacao está en la quebrada de Curuto. Más allá del río Punilla, hacia el norte, se encuentra Paicuqui, de verdes intensos en verano.
Real Grande es apto para trekking, camping, escalada en roca y rappel. En Quebrada Seca hay cuevas con pinturas rupestres milenarias. Las antiguas minas de oro de Incahuasi se encuentran al borde del Salar del Hombre Muerto y fueron explotadas por los jesuitas, aunque se remontan al periodo incaico.
Hostelería: Hostería Municipal (03835410679/3834594459: hosteriaantofagasta123@gmail.com), Hostería Pucará, Hostería Pueblo del Sol, Cabaña Casa de Piedra (+543835409166) , Cabañas Sumak Kawsay, Hospedaje Samay Wasi, Entre Volcanes y Flamencos, Hospedaje Rural (Lucas Soriano 3834595551), Hospedaje Marcos Fabián (3834230534), Hospedaje Pascual Fabián (3834026413), Hotel Suyay (ver comedor Suyay), Jalen Apart Hotel (+543524401790), Hospedaje de Doña Cirila (3835522707) y los sitios que ya nombré en mi otra entrada y que recomiendo.
Sitios de atracción turística de Antofalla que no conocí: El Mortero (viejo trapiche jesuítico y ruinas de un asentamiento minero), Pozo Bravo y Laguna Verde (cercanos a Antofalla), Mirador de Antofalla, Volcán de Antofalla (6400msnm), Las Quinuas.
Alojamientos turísticos de El Peñón: Alojamiento La Punita (Julia Liquin 3834 35-8472), Hospedaje el Portal de Puna (Mario López 3834482222), Hospedaje La Pomez (Reyna Salva 3834000667), Hospedaje don Carmelo (Feliciana Guzmán 3834371009), Hosteria De Altura (Romina Morales 3835501353), Hospedaje Las Dunas (Rubén Quipildor 3834 692110), Hospedaje Patta Tikan (Edith Aguirre 3814 18-4472).
En el enlace de guías y baqueanos de Antofagasta también están los de El Peñón.
El Peñón es una localidad cercana al Campo Piedra Pómez, a 63km de Antofagasta de la Sierra.
HOTELERÍA EN BELÉN
Otros:
Hotel del campo 03835464681 Cabañas Retamar +543835413481
Villa San Ignacio 3835 415170 / 3835 528616 Hosteria Hualfin 3834804550
Para ir a Antofagasta de la Sierra tienen tres opciones:
La más común, y la que es posible realizar en micro, es desde Belén, Catamarca.
La segunda es para hacer en 4×4 por huella desde Fiambalá, Catamarca.
La última es desde Tolar Grande, Salta, atravesando toda la Puna. Ambas poblaciones se encuentran a 233km. Para llegar hay que bordear el salar de Arizaro y cruzar Antofalla desde el norte. Es lo que yo hubiera querido hacer. Así o al revés, desde Antofagasta a Tolar Grande.
Fin de semana largo de octubre e iba a aprovecharlo con un viaje que me había quedado pendiente desde que conocí Catamarca y supe de sus paisajes espectaculares.
Mi vuelo de Aerolíneas Argentinas salía a las 7:55 así que de nuevo tuve que levantarme muy temprano para ir a Aeroparque. Resulta que todavía por el tema del Covid te piden estar 3 horas antes (o te pedían en octubre) en el aeropuerto para vuelos de cabotaje y 4 para vuelos internacionales. Una barbaridad. Por las dudas lo hice. No sé si realmente hacía falta aunque la fila para despachar valijas que iba a la zona sur del país era impresionante. Fui en Cabify y me quedé viendo una película en la tablet mientras esperaba.
Partimos en punto y poco después aterrizábamos en la capital de la provincia de Catamarca. No hay transfer del aeropuerto a la ciudad así que tuve que tomar un taxi a la terminal (carísimo). Como mi colectivo a Belén salía a las 12:30 tenía tiempo de sobra en la terminal: reservé en un hotel próximo para la noche de mi regreso, compré una porción de tarta de manzana en una panadería, alfajores de turrón en una tienda de productos regionales y el pasaje de vuelta. Fui con la empresa 25 de agosto que ahora puede comprarse online por Plataforma 10. Al finalizar la entrada del blog colocaré qué empresas van a Belén y los horarios. Lamentablemente la mayoría se sigue manejando sin reservas ni páginas de internet.
En el bus me encontré con quienes serían mis compañeros de aventura y nos pusimos a charlar. Yo pensaba dormir en el viaje, pero al final conversamos las 4 horas y media (o casi). Pido perdón a los demás pasajeros si nuestro entusiasmo no les permitió descansar.
Una vez en Belén fui a instalarme al hotel y a pagar el tour a la Puna. Me hospedé en el mismo hotel donde estuve antes, excepto que ahora tiene otro nombre y está renovado ya que cambió la gerencia: Hotel El Molino en Ruta 40. Me tocó en otra habitación, una más alejada de recepción y por tanto más silenciosa. La habitación era cómoda, con calefacción, Direct TV, baño privado con ducha caliente y desayuno. Del baño me molestó (siempre me molesta eso) que la ducha no tuviera separación y se mojara todo y el desayuno no pude probarlo porque al otro día madrugué. Humilde, pero muy buena atención. La ubicación es cómoda para moverse por el centro e ir a la terminal. El precio es acorde a lo ofrecido.
Respecto al tour. Uno no se puede mover por cuenta propia en la Puna, o se puede a medias. Así que organicé varias excursiones + el traslado a Antofagasta de la Sierra con la agencia Sekun con la que ya había viajado antes y era la única que me había respondido afirmativamente. Hay otras dos agencias en Belén, pero Chaku Aventuras ni se molesta en contestar si es una sola persona y nadie me respondió de la página oficial de Famayfil. El precio fue muy bueno, aunque se realizó un cambio de último momento inconsulto y no se nos realizó ninguna rebaja. Por esta razón no sé si recomendarlo o no. El tour igual se hizo y los guías fueron bastante buenos, pero ese cambio y las mentiras que lo sustentaron me hacen dudar de todo. No sé. Decidan ustedes. Al ser la agencia más económica es la que más ha crecido en Belén.
A la noche fui a cenar con uno de los futuros «sobrevivientes de Antofagasta» que había conocido en el colectivo. Comimos gigote (un plato típico del lugar) en Koas, un restaurante frente a la plaza principal. Debí haber pedido media porción porque era mucho para mí.
Fui a dormir temprano. Al día siguiente comenzaría el paseo.
Antes de seguir, ¿por qué contraté un tour con traslados? Bueno, para conocer la Puna hay que llegar a Antofagasta de la Sierra y para ello hay un sólo medio de transporte público: El Antofagasteño que viaja una vez por semana para allá los viernes a las 12 y vuelve de Antofagasta a Belén los lunes a las 13. No hay más días. Un único horario y varias horas de viaje en un colectivo sin comodidades y con muchas paradas. No se puede comprar online, sólo en boletería de Belén y hay que rezar que esté abierta y haya lugar. Esta es la única alternativa para ir «por libre», pero en Antofagasta sí van a tener que contratar excursiones.
Me pasaron a buscar a las 7:30 y luego fuimos por los demás. En lo personal me pareció que fuimos demasiado rápido, lo cual no ayudó en el acostumbramiento a la Puna. Originalmente íbamos a ir el viernes y volver el lunes. Pero a último momento la agencia modificó el tour y volvimos el domingo. Esto no sólo supuso un caos en la búsqueda de un hotel sobre la hora en Belén sino que también se fusionaron excursiones. En principio, el viernes íbamos a ir a Antofagasta pasando por los Castillos de Villa Vil (caminata opcional) o pueblo de Laguna Blanca y no mucho más. Iba a ser un trayecto tranquilo. A la vuelta, más adaptados a la altura, íbamos a pasar por el campo Piedra Pómez. Al quitarnos un día de excursión, todo tuvo que apretarse y pienso que por eso nos apuramos, lo cual originó todos los problemas que vinieron después. Como ya dije, el precio no se modificó.
La primera parada fue en Puerto Viejo donde caminamos unos minutos y sacamos fotos entre las formaciones que parecen barcos encallados. Luego en las dunas de Randolfo y vimos de lejos Laguna Blanca. Hubo una parada técnica en El Peñón (nadie comió nada porque teníamos el estómago revuelto por las curvas y la velocidad) y antes de las 13 estábamos en el Campo Piedra Pómez. Sinceramente lo disfruté mucho más en mi viaje anterior. Supongo que había perdido la sorpresa. Creo que tampoco estuvimos tanto tiempo. O tal vez sí. No sé. Sigue siendo igual de bello y espectacular, pero la primera vez te deja sin aliento.
El Campo Piedra Pómez tiene una superficie de 75.489ha y tiene formaciones de roca rosada, blanca, ocre y amarilla que superan los 4m de altura. La extensión del campo es de 23km de norte a sur. Se puede acceder también desde Fiambalá, pero por huella en 4×4.
Ahí cambiamos de camioneta y guía. Lo siguiente fue más pausado y más interesante porque era todo nuevo para nosotros. Rodeamos el volcán Caranchi Pampa y paramos en la Laguna Caranchi Pampa donde estiramos las piernas y observamos lejanos flamencos. Un lugar único. Luego nos detuvimos en Campo los Negros (un escorial de lava – mi segundo este año), vimos el volcán Antofagasta (que en mejor estado físico es posible subir) y llegamos al pueblo de Antofagasta de la Sierra a 3323msnm. El volcán Antofagasta es una chimenea con forma de cono y, supuestamente, su vista panorámica abarca desde Campo Piedra Pómez a la Laguna Antofagasta.
Hay poca hotelería. Yo me hospedé en una Guest House muy económica y confortable a metros de la Gendarmería. Tenía una habitación grande con dos camas individuales y frazadas super abrigadas. Además, poseía una mesa con pava eléctrica, estufa eléctrica, buen wifi y un baño enorme con ducha caliente. Tal vez en invierno no sea la mejor opción porque los calefactores eléctricos no calientan mucho y allá el frío puede ser muy intenso. Pero recomiendo el lugar. Privado y tranquilo.
Apenas llegué al alojamiento, me acomodé un poco y salí a visitar el Museo del Hombre (pequeño, pero incluye dos momias) y la plaza principal. Compré algunas frutas en un mercado de avenida Belgrano y vi artesanías en el local de enfrente. Muchos sitios mantienen las puertas cerradas por el viento, eso no significan que estén realmente cerrados. Luego compré facturas en la panadería SM que hay sobre calle Catamarca pasando mi hospedaje. Preparan sandwiches y comidas.
Los comedores abren a las 20h y la verdad es que yo quería ducharme y acostarme. No quería esperar hasta esa hora así que me preparé algo en la habitación con lo que había llevado. Para cenar me recomendaron el comedor Suyay, pero por el tema de los divertículos me estoy cuidando con la comida y nunca sé qué comer. ¿Y si me cae mal? No podía arriesgarme. Mis compañeros de viaje pidieron una sopa de quinua muy rica porque querían algo sencillo. Te dan comida para llevar si vas con un recipiente.
Me hice un té de coca que había comprado en Belén y me fui a dormir.
Al otro día hicimos nuestra primera excursión a Antofalla. El guía, Ramón Vázquez, fue excelente y lo mejor del viaje. Siempre se ocupó de nosotros y estuvo pendiente de todo. Debería tener su propia agencia de turismo. Abajo les paso su contacto.
Quebrada de Calalaste. Lo primero que vimos desde la altura fue el Salar de Antofalla con una longitud de 150km a 3900msnm. Llegamos al punto más alto a 4635msnm. Siguientes paradas: Vega Los Colorados (humedales de altura alimentados por aguas subterráneas que crean una pradera nativa), el impresionante Mirador del Salar de Antofalla, otro punto cercano al salar, y finalmente el pueblo de Antofalla.
El pueblo pertenece a la comunidad indígena kolla atacameña así que pagamos la entrada ($300) y yo compré un llavero. Nos sentamos a comer algo. Como yo tenía un fuerte dolor en la nuca debido a la altura, me convencieron de ir a la salita de salud (que paga la minera extractora de litio). Ahí me dieron 5 minutos de oxígeno y me sentí mucho mejor. Yo había tomado temprano una cafiaspirina, pero en la salita me dijeron que el remedio que tomo para la migraña me servía así que cambié a ese y resultó más efectivo. Nos sacamos fotos en la puerta de la pequeña iglesia y seguimos viaje.
Bordeamos el volcán Antofalla y llegamos a Ojos de Campo. Los Ojos de Colores son geiseres apagados en medio del salar de Antofalla. Tienen tres tonalidades: azul, verde y naranja debido a los estromatolitos de la Puna. En total se trata de 12 pozas, la más representativa es la poza Fanta por su color anaranjado. Algunas pozas se han secado. Lamentablemente el viento impidió aprovechar fotos usando el reflejo de las aguas. Tampoco los vi tan coloridos. Luego conocimos el Cono Salar de Antofalla, muy similar al Cono de Arita ubicado en Salta. ¡No sabía que había un cono así en Catamarca! Es como una pirámide en medio del salar. Después nos sacamos algunas fotos sobre el salar y, como encontramos una hendidura con hielo en la montaña, lo usamos para unas fotografías de película. El hielo ya estaba derritiéndose con la llegada de la primavera.
Llegamos al paraje Botijuela que consiste en una pequeña terma en medio de la nada. El dueño nos cobró la entrada y nos acercamos al pozo. El guía tuvo que ayudarnos porque el viento era terrible. Fuimos agarrados de la mano y nos sentamos junto al espejo de agua caliente. Más inhóspito y fascinante, imposible. Vega Botijuelas, Quebrada del Diablo y Laguna Colorada.
Así volvimos a Antofagasta de la Sierra. De no haber estado afectada por la altura habría subido al mirador del pueblo. Quería hacerme un sandwich de atún, pero como no había pan del día en la panadería fui hasta Multiservicios El Amigazo donde tenían pan casero que compartí con uno de mis compañeros de viaje. Última noche en Antofagasta y otro hermoso atardecer.
Último día de excursión. Fue la más larga, pero la que mejor pasamos. Salimos hacia el Volcán Galán, la caldera volcánica más grande del mundo. Tiene 45km de norte a sur y 24km de este a oeste. El pico central se encuentra a 5912msnm.
Nuestra primera parada fue en el Campo Las Tobas para ver petroglifos, pinturas rupestres grabadas en el suelo. Una cosa que no sabía es la cantidad de sitios arqueológicos que rodean Antofagasta de la Sierra. Los de Campo Las Tobas datan de hace 1500 años, pero hay evidencia de poblaciones humanas en Antofagasta desde hace 9000 años. En cada viaje tengo que visitar un sitio arqueológico.
Entramos luego en una zona similar a Talampaya, pero sin el rojo característico: el cañón Real Grande con paredes de hasta 70m de altura. El guía nos contó que en verano (sin tanto viento) está bueno recorrer el cañón caminando. Encontramos un área con hielo así que anduvimos sobre hielo que por suerte no era resbaladizo. Fue muy divertido.
Seguimos ascendiendo. Llegamos a la Barda o borde sur del volcán Galán (4760msnm) y empezamos a ver la Laguna Diamante que se halla en el medio. La Laguna Diamante (a 4650m) es entre 5 y o veces más salada que el mar y contiene un gran contenido de arsénico (12 mil veces superior a lo tolerado por el ser humano). En un día sin viento debe ser hermoso sentarse en la orilla, pero con el viento la laguna no parecía de diamante sino bastante amarronada. Pero bueno. Vimos guanacos y un zorro nos pidió comida.
En los Hervideros vimos el humo de riachos y pozos de agua caliente. Y más allá, formaciones rocosas que semejaban esfinges egipcias.
Finalmente arribamos a Laguna Grande para ver a los flamencos rosados. ¡Había cientos! Y estaban bastante cerca. Era hipnótico. La excursión terminó luego en El Peñón. Allí cambiamos de guía y volvimos a Belén.
Como retornamos un día antes de lo previsto, tuve que conseguir una noche de hotel con todo ocupado por ser fin de semana largo. Casi por casualidad conseguí una pieza en el Hotel Gómez (03835-461388), a dos cuadras del Hotel El Molino. No está nada mal. Es muy similar al otro. Habitación cómoda con aire frío/calor, cable, baño con ducha caliente (nuevamente la ducha no tenía separación y se mojaba todo), desayuno incluido y guardaequipaje. Buen precio y buena ubicación.
Me instalé y fui a la plaza para comer algo. Todos los restaurantes estaban llenos y como yo no había almorzado estaba muerta de hambre. Al final compré un sandwich de lomito en el bar El Encuentro. Ahora sí estaba muerta de cansancio.
¿Qué hice hice último día en Belén? Había pensado en contratar otra excursión (A Villa Vil o Minas Capillitas), pero era muy caro para mí sola. Por ese mismo precio me compré una frazada de lana en Los Antonitos. Fui a la plaza a comer un helado en Grido, hice compras y caminé un poco.
Al mediodía nos encontramos para almorzar en el restaurante del Hotel Belén (uno de los mejores hoteles de Belén, pero siempre lleno con contingentes). El restaurante es tranquilo y económico. Yo pedí pollo al verdeo, mi plato favorito en la actualidad. Aunque yo ya los conocía, visitamos los siguientes centros de artesanías textiles: La Cueva y Las Arañitas Hilanderas (antes yo había ido a Rúa Chaki). Nos explicaron todo el proceso desde la lana pura al tejido terminado. Es muy interesante.
Volví al hotel Gómez para poner mis cosas en orden (sólo puedo criticar que no hay nadie permanente en recepción) y como era muy pesado pedí un taxi a la terminal. Salimos pasadas las 18:30 hacia la capital de la provincia. Llegamos tarde, pero mi hotel estaba a metros de la terminal, apenas saliendo del estacionamiento: Hotel Coral. Habitación amplia con balcón a la calle, placard, TV con cable, wifi, baño cómodo. Es un hotel que pasó sus mejores épocas, pero me gustó. Al otro día el desayuno en el último piso me permitió unas vistas preciosas de la ciudad. No puedo quejarme. Pagué un poco más y pude tener un check out tardío. En la recepción del hotel me pidieron un taxi y me cobró bastante menos que el taxi que tomé en el aeropuerto. No pude recorrer mucho el centro, aunque compré nueces y aceite de oliva.
El retorno a casa fue sin incidentes. Era hora de volver a la rutina.
PENDIENTES BELÉN
Circuito Norte Chico – Puerta San José.
Castillos de Villa Vil
Pozo de Piedra
Puntilla
Minas Capillitas en Andalgalá
PENDIENTES ANTOFAGASTA DE LA SIERRA
Circuito Salar del hombre Muerto + mina de oro Incahuasi.
Circuito Arqueológico local: El Coiparcito (4km de Antofagasta), Laguna de Antofagasta. Pucará de la Alumbrera.
Circuito Peñas Coloradas (farallones de ignimbrita) – Quebrada Seca. Pinturas rupestres de hace miles de años.
Circuito Salar de Incahuasi: Laguna Colorada, Salar de Incahuasi, Laguna Purulla.
DATOS DE TRANSPORTE (actualizados octubre 2022)
La empresa Robledo hace el viaje Fiambalá-Córdoba con este recorrido: Fiambalá, Tinogasta, Aimogasta, Belén, La Rioja.
Transporte Parra Santa María-Belén. De Santa María los lunes y viernes a las 13. De Belén a Santa María los martes, jueves y vienes a las 18:15. Tienen además otro horario de Belén a Santa María los lunes y viernes a las 20.
Transporte Parra Catamarca-Belén. Desde Catamarca: martes, jueves y viernes 13:30. Desde Belén a Catamarca: domingo a las 16h, lunes, martes y jueves a las 2am. (Tel: 03838420254 taparra@yahoo.com)
Transporte El Indio de Belén a Salta: jueves 6:00. (Tel de Santa María 03838420254). Van a Cafayate, Hualfín, etc.
El Antofagasteño permite consultas por mensaje de texto en whatsapp al 3835-511509. Viajan a Antofagasta (el trayecto dura 7 horas) y Catamarca. No hacen reservas. Va de Catamarca a Belén de lunes a jueves a las 13, viernes a las 6am y domingos a las 18. Vuelve de Belén a Catamarca de lunes a viernes a la 1am, lunes a las 19 y viernes 12:30.
Con respecto a la empresa 25 de Agosto con la que yo viajé, pueden ver y comprar los pasajes online en Plataforma 10.
La empresa Rutas del valle no existe más o al menos eso me dijeron en Belén.
OTROS DATOS
Turs Viajes: excursiones en Villa Vil (Los castillos, las Dunas, Laguna Blanca, etc). Transportes La Pampa.
Guest House Antofagasta: +549383-4002041. Esquina Catamarca y Sarmiento.
Otros hospedajes en Antofagasta: Alojamiento Famana (la dueña, Rita, es una persona maravillosa y colaboró muchísimo con mis compañeras de excursión, además tiene una despensa: +549383-4251985), El Coplero (+549383-4783869), Hospedaje Cielo Andino tiene habitaciones con baño privado o compartido, lamentablemente no siempre había ducha caliente y saltaba la térmica cuando todos prendían el caloventor. Pava eléctrica, anafe y heladera (Noelia: +549383-4240640). No busquen lujos.
Guía Ramón, Antofagasta de la Sierra: +549383-4235165.
Otros alojamientos en Belén: Hospedaje Shaka Ekeyey (departamentos completamente equipados en Pasaje Rivadavia: 03835-461068/ 15402061/ 15521144, alojamientoshaka@gmail.com), Hostel Bezeta (tiene habitaciones privadas, compartidas y departamentos: +5493835-690129), Alojamiento Sandra (+5493835-444567).
Hotel Gómez: $3500 habitación single.
Famayfil Turismo: si no pueden comunicarse con la agencia de Belén, pueden hablar con Mario a su celular 3835-121050. Van al Campo Piedra Pómez y hacen el circuito Fiambalá en dos días (ruta del Adobe, termas, Los Seismiles, Balcón del Piscis).
El Shincal: visitas guiadas al +5493835-534050. Para más información sobre el sitio pueden visitar mi otra entrada sobre Belén.
Fábrica de sandwich La Delfina (Belén).
Hotel Coral: +549383-4291912. San Fernando del Valle de Catamarca.
En una nueva entrada sumo más hoteles en Belén. Estos que anoté aquí son los que conozco.
El volcán de Antofalla (6440msnm) es el tercer volcán activo más alto del planeta. Posee tres cumbres, la más elevada es el nevado de Antofalla.
Como iba diciendo, salí de Belén en el colectivo de las 13hs. Paramos en Aimogasta donde bajé al baño y llegué finalmente a la capital de la provincia de Catamarca: San Fernando del Valle de Catamarca. Aunque el hotel no estaba muy lejos de la terminal, no pude ubicarme así que tomé un taxi que me salió $32. Me dejó en la puerta del hotel y se me cayó el alma a los pies.
Resulta que donde me resultó más difícil reservar un hotel fue en la capital. No hubo manera de hacerlo por email (no contestan), facebook o página de internet. Todo lo que está online era carísimo. Empecé a llamar según la lista que me pasó la Casa de la Provincia. Imaginen lo que me costó llamar a Catamarca por teléfono desde Buenos Aires. Y llamar a ojo, sin referencias. Encima los hoteles me contestaban que no hacían reservas tan alejadas de la fecha o que ya estaban completos. Me empecé a desesperar. Al final conseguí una reserva en el Residencial Comodoro (y eso después de llamar tres veces y volver a confirmarles desde Belén). La ubicación era perfecta y el precio, adecuado. ¡Pero cuando lo vi! Nada seductor. Adentro no era mejor. Está muy descuidado. La pieza me pareció una caja: techo bajo, pequeña, con la ducha casi encima de la pileta y el inodoro… El televisor, viejísimo y diminuto, funcionaba mal, wifi sólo en recepción… Al menos era limpio. Me tranquilicé un poco al ver que era un hotel familiar y al otro día -con el sol radiante- no parecía tan hostil. No ofrece desayuno (sólo agua caliente) pero uno puede guardar algo en la heladera. Igual es poco lo que ofrece por el precio. Aunque no sé si hay más baratos (en vacaciones de invierno la single salía $400 la noche).
Me acomodé un poco y pasé por la oficina de turismo que está en la esquina de República y Rivadavia (hay otra en la plaza principal, frente a la iglesia). Caminé un poco y pasé a la agencia Yokavil que está en la peatonal. Compré dos excursiones. Al lado de la galería donde está la agencia se encuentra el supermercado Vea. Estaba muerta de hambre. Compré en la rotisería del super una porción de matambre de pollo y una bomba de papa. Comí en las mesas de planta baja que hay en el hotel.
Al otro día me pasaron a buscar a las 9hs para la excursión a la Cuesta del Portezuelo – Dique las Pirquitas ($380). Lamentablemente mis dos compañeras de viaje eran absolutamente insoportables. En serio. Brujas. Así que no sé si es que el guía no era muy bueno o no las aguantaba. Digo esto porque no hicimos exactamente lo que prometía al folleto ya que no fuimos a las ruinas del trapiche azucarero.
Estaba nublado. Pasamos por el sitio donde encontraron el cuerpo de María Soledad Morales (seguramente oyeron del caso María Soledad) y luego subimos hasta el segundo mirador de la Cuesta del Portezuelo. Es hermosa pero con sol lo hubiera disfrutado más. Arriba hay varios puestos con productos regionales. Yo les recomiendo comprar bombones de nuez rellenos con dulce de leche y cubiertos de chocolate, bombones «El Mirador». También resultaron muy ricos los alfajores de turrón de «Cuesta del Totoral». Me lo van a agradecer. Estuvimos allá un buen rato.
Luego fuimos a la casa Natal de Fray Mamerto Esquiú. Mamerto Esquiú (1826-1883) participó en la defensa de la Constitución Argentina de 1853. Asimismo se le ha iniciado una causa de beatificación. La casa natal se encuentra protegida dentro de otro edificio ya que se trata de una casa de adobe y techo de cañas y barro. El guía que nos hizo el recorrido era muy entusiasta. Pasamos por la iglesia de San José y seguimos viaje.
Fuimos entonces al murallón del dique Las Pirquitas. El dique, fundado en 1961, alberga un lago artificial de 7 kms. En el Club Náutico Los Talas se pueden alquilar kayaks, motos de agua y lanchas. Muy tranquilo.
Las Pirquitas
Volvimos a la ciudad y yo aproveché para ir a almorzar a Caravati. Al mediodía todos los restaurantes alrededor de la plaza tienen menúes medianamente económicos. Yo quería comer carne o pollo, así que me fui fijando en los carteles. Acá el menú de $160 consistía en carne al horno con papas y flan y se podía pagar con tarjeta. Entré. Estuvo bien. Me habían recomendado ir a La fonda de Carlitos donde uno puede degustar a buen precio (aunque no es tan barato) comidas regionales. La verdad es que estaba lleno y no daban abasto. Estuve 10 minutos y ni siquiera se acercaron a preguntarme qué quería. No quería esperar tanto para comer.
Descansé un rato en el hotel y más tarde salí a conocer mejor la ciudad. Pasé por el convento de San Francisco (no pude entrar porque abre más tarde) y recorrí el Museo Arqueológico Adán Quiroga. Tiene una gran sala con varias vitrinas. De ahí fui al Museo de la Virgen del Valle que me pareció más interesante. Tiene varias salas. Destaco los mantos bordados a mano y todo lo que aprendí de la imagen ya que no sabía nada.
«La imagen de Nuestra Señora del Valle fue encontrada entre 1618 y 1620 en una gruta de Choya, provincia de Catamarca. Cuenta la historia que fue un aborigen al servicio de don Manuel Salazar quien escuchó durante una tarde varias voces y pisadas, y de repente fue sorprendido por un grupo de muchachas con lámparas y flores que caminaban sigilosas hacia la montaña. Pese a la sorpresa, el observador prefirió regresar a su rancho, pero la curiosidad pudo más. A la mañana siguiente, de vuelta en aquel lugar, decidió seguir las huellas que quedaron de las muchachas. Después de caminar varios kilómetros, se encontró con un pequeño nicho de piedra rodeado por restos de fogones y numerosas flores. Continuó caminando hasta toparse con la imagen de la santísima Virgen María, con su rostro moreno y las manos juntas en forma de rezo.» Así comenzó la veneración de la imagen a la que se le atribuyen numerosos milagros.
Fui al Camarín de la Virgen en la iglesia Catedral donde pude ver muy cerca la imagen mientras la gente rezaba o lloraba de emoción. Según la hora puede vérsela de frente en el Camarín. Nunca durante las misas.
Luego -y esto fue lo mejor- visité el campanario de la iglesia. Impactante. Primero vimos el coro de la catedral. Seguimos subiendo hasta la torre donde están las campanas. Imaginen la vista de la plaza. Único. Recorrí después la catedral.
Ya había anochecido cuando salí hacia el Mercado Artesanal. Igual cierra a las 21hs. Allá compré aceite de oliva y licor de nuez.
De vuelta hacia el hotel compré un sandwich gigante de miga que se convirtió en mi cena.
Último día de vacaciones. Me levanto y hago el check out del hotel. Dejo las cosas y salgo con un bolsito. A dos cuadras me pongo a esperar el colectivo 101A que tarda bastante. Por suerte los colectivos en San Fernando del Valle de Catamarca funcionan con la tarjeta Sube. La misma tarjeta que usamos en Buenos Aires.
Catedral
Finalmente vino el colectivo y, tras un recorrido de 25 minutos, me dejó en la entrada del sitio arqueológico del Pueblo Perdido de la Quebrada. Es un pequeño sitio lleno de cardones gigantes perteneciente a la cultura de La Aguada, esto es, hace 1800 años. Estuvo habitado del 230 al 450 dC. Hay restos de recintos habitacionales, pasillos, etc. Lamentablemente no se podía visitar el museo porque, debido a los robos, había tenido que cerrar. Una guía me acompañó en el recorrido explicándome sobre las construcciones y la vida de los antiguos pobladores.
Después me quedé un rato sola en las ruinas, sacando fotos y disfrutando del paisaje de las montañas del Ambato. Aunque sea por esto vale la pena ir.
La zona de la quebrada daba para caminar un poco más pero no quería volver muy tarde porque tenía una excursión. Así que esperé el colectivo de vuelta. Compré algo para comer en el supermercado Vea. Mientras caminaba de vuelta al hotel, descubrí otros lugares posibles donde comprar comida y más barata. Les recomiendo ir por la calle Salta desde el 800 hasta la altura de la plaza: hay varios locales.
Pueblo Perdido
A las 14:30 pasaron a buscarme para hacer Villa El Rodeo-Gruta Virgen del Valle- La Puerta. Costó lo mismo que el otro tour pero me gustó más, tal vez porque el guía era más copado. Primero fuimos a la Gruta de la Virgen del Valle. Si quieren, pueden ir en colectivo.
Pasamos por el dique El Jumeal y dimos una vuelta por el Balcón de la Ciudad -vista panorámica de la capital- y el Monumento a la Mujer Aborigen. Allá tuvimos que evitar a un contingente enorme que estaba sacando fotos. Seguimos hacia La Quebrada, Loma Cortada y llegamos a la Villa El Rodeo.
En Rodeo empezamos con el Mirador al Cristo donde el guía nos contó la historia misteriosa del escultor que realizó la obra y desapareció. Hermoso lugar. De ahí fuimos a la Hostería El Rodeo a tomar algo. Continuamos viaje. Cruzamos el río Ambato y vimos los signos de la destrucción de 2014 cuando se desbordó y arrastró puentes, casas, etc. ¡Y parecía tan inofensivo! Apenas un hilo de agua…
Anochecía. Cuestecilla, Cuesta del Ambato, Villa La Puerta. Llegamos al dique Las Pirquitas donde tuvimos otra vista del sitio. Tan pacífico, tan mágico…
Llegué al hotel y terminé de arreglarme. Me vinieron a buscar para ir al aeropuerto que queda bastante lejos. El vuelo se atrasó media hora porque había mucha niebla en aeroparque. Finalmente salimos. Llegué a Buenos Aires pasada la medianoche. La niebla se había hecho más espesa. Tomé el Arbus hasta el centro y de ahí un taxi a casa.
Me quedó pendiente el tour Balcozna con cuesta de Singuil pero no se armó grupo. Tampoco pude ir al Calvario ni caminar por el dique El Jumeal. Dicen que la Fábrica de alfombras es algo único, reconocida internacionalmente. También se puede ir a la Casa de la Puna por tejidos.
Otros atractivos de la zona central de Catamarca: Circuito Torres y Campanas, Túneles de la Merced (Paclín), Bosques de Arrayanes (Capayán). ¡Sí! ¡Hay arrayanes en Catamarca!
City tour a la gorra «Caminando la historia»: sábados, domingos y feriados a las 11:30 y a las 15hs. Lugar de encuentro en la plaza principal, esquina Sarmiento y San Martín. Gratis, con propina.
PRINCIPALES ATRACTIVOS de SAN FERNANDO: Circuito religioso (Catedral Basílica, Camarín, Plazoleta de Fray Mamerto Esquiú, iglesia de San Francico, Museo de la Virgen del Valle y Gruta de la Virgen del Valle), Mercado artesanal y Fábrica de alfombras, Museo Caravatti, Casa de la Cultura, plaza La Alameda, Pueblo perdido de la Quebrada.
Regionales Cuesta del Totoral, Bº Evita casa 6, La Merced, Paclín – Catamarca. 0383-4495085/ 0383-154588917.
Mercado Artesanal: se puede pagar con tarjeta. Los horarios son de lunes a viernes de 7 a 13 y de 15 a 21hs; sábados, domingos y feriados de 8 a 20hs.
El colectivo 204 GM va a la Villa El Portezuelo pero no sube la cuesta (se puede tomar en estación terminal / Salta entre San Martín y República / Salta entre Esquiú y Prado)
Los colectivos 201-203 Ramal 1 (25 de agosto) van a Villa Pirquitas y la Casa Natal de Fray Mamerto Esquiú. Lo pueden tomar en los mismos sitios que el 204 GM.
El colectivo 101A (coop. San Fdo) va al Camping Municipal, al Pueblo Perdido de la Quebrada y al Calvario (lo pueden tomar en Salta entre Chacabuco y San Martín / en la Universidad Nac. de Catamarca de Av. Belgrano / Av. Mariano Moreno – Camilo Metet).
El colectivo 202 GM va al Dique El Jumeal (Plaza el Maestro / Av. Virgen del Valle / Paseo General Navarro).
El colectivo 104 EL NENE va a la Gruta Virgen del Valle (Salta entre República y Esquiú / Universidad Nac. de Catamarca).
Día del amigo. Me levanté bien temprano y fui caminando a la terminal de Tinogasta. El micro de Robledo salía a las 6am. Allá me encontré con los chicos del Chaco que había conocido en el hostal. Tardamos casi cuatro horas en llegar a Belén porque paramos un laaargooo rato en el cruce de las rutas 60 y 40 para subir pasajeros de otros dos buses. Así que paramos en medio de la nada. Con frío (sólo el chofer tenía calefacción) y sin baño porque estaba roto. Yo había bajado corriendo al baño de la terminal de El Salado y luego tuve que aguantar.
Los horarios de Tinogasta a Belén directos con Robledo son: martes, jueves, sábado y domingo a las 6am. Los viernes había un servicio a las 12 (supongo que porque eran las vacaciones de invierno). Otra opción es tomar el micro de Robledo de las 13:15 a Aimogasta. Bajar en Alpasinche (cruce de las rutas 60 y 40, hay un puesto de Gendarmería) y esperar un colectivo que vaya a Belén. Me dijeron que pasa uno de la empresa 25 de agosto y que sólo tendría que esperar unos 15 minutos en la ruta. Por las dudas no quise arriesgarme. Dos chicos mochileros que conocí después hicieron algo similar. Se bajaron el Alpasinche y ahí hicieron dedo hasta Belén. Sólo esperaron 10 minutos.
Desde la terminal de Tinogasta fui caminando al Hotel Angélica que había reservado por facebook. Los chicos que viajaron conmigo fueron a preguntar a la oficina de turismo y les consiguieron hospedaje en un hotel tan nuevo que aún no estaba terminado. Me dijeron que el servicio era muy bueno.
Respecto al hotel Angélica. Es un hotel bastante grande en la ruta 40, acaso un poco solitario de noche aunque tranquilo. Incluye desayuno (básico, no pidan más), dispenser de agua fría y caliente en el desayunador, habitación con radiador eléctrico, televisor con cable, placard, ducha caliente (recuerden avisar para que enciendan el calefón -por las dudas-), wifi, buen precio. ¿Qué no me gustó? Que la ventana de mi habitación diera a un patio interno por lo cual no daba abrir la ventana. Me pareció también un poco ruidoso. No es que estuviera al lado de la recepción, pero se escuchaba todo. Pidan una habitación más alejada.
Biósfera Laguna Blanca
Apenas me instalé fui a comprar algo para almorzar. Comí una porción de tarta de pollo en Pollo Crak-Crak, una rotisería en Lavalle casi Belgrano. Luego dormí un rato de siesta. Fui a caminar por el centro. Averigüé por el tema de excursiones y visité un centro de tejidos. Belén no es en vano la CUNA DEL PONCHO. Conocí el taller de Graciela Carrasco, sin saber que era famosa ya que Macri le regaló uno de sus ponchos al Papa. Yo me pude probar uno similar (tiene la bandera argentina). No sale tan caro como uno podría pensar. $3000 por ese poncho me pareció un buen precio. Aunque no uso ponchos ni usaré. Graciela fue muy amable y explicó todo el proceso de hilado, teñido y tejido. Yo sólo le compré un imán y un llavero para poder decir que estuve ahí. No había plata en los cajeros (un problema repetido en Belén). Como los chicos no tenían efectivo fuimos a comprar algo al supermercado Calchaquí que estaba festejando el día del amigo. Al final terminamos cenando ahí, comiendo un poco de todo lo que nos daban para probar, desde paella a fiambres, pizzetas, etc. Un día del amigo distinto, un tanto bizarro. ¡A que nunca lo festejaste en un supermercado!
Al otro día fuimos en un tour a Piedra Pómez. Les cuento. Hay dos agencias oficiales en Belén. Una es Famayfil Viajes y Turismo ubicada frente a la plaza y la otra es Chaku Aventuras. Pero ninguna de las dos tenía excursiones de un día a Piedra Pómez ya que prefieren ir varios días pernoctando en Antofagasta de la Sierra. Al final me comuniqué con un guía de Sekun, Secundino Vazquez. El paisaje de ingreso a la Puna es hermoso. Paramos en Puerto Viejo, un sitio donde las rocas parecen barcos abandonados. Después en la Hostería Barranca Larga para pasar al baño. Pasamos dunas y grupos de vicuñas. Siempre por la ruta 43. A medida que ingresábamos en la puna el paisaje se volvía más espectácular. Llegamos al abra de Pasto Ventura y la reserva de biósfera de Laguna Blanca. Finalmente arribamos al pueblo de El Peñón. Allá nos encontramos con Tomás, un guía que por suerte sí conocía el lugar.
Campo de Piedra Pómez
La localidad de El Peñón está a 3400 mts, a 35 kms del Campo de Piedra Pómez. Pueden conseguir hospedaje y contratar un guía-vaqueano. Tomás se ubicó en nuestra camioneta y el viaje se hizo mil veces más placentero. Fuimos primero al mirador de la Virgen de la Peña. Se supone que en la piedra puede observarse la imagen de la Virgen, pero por más que miré no pude encontrarla. El sitio es hermoso. Todo era hermoso, de otro planeta.
Fuimos hacia el Volcán Carachi Pampa (es zona de volcanes, hay unos 200 en el área). Sin palabras. Si el cielo no hubiera sido azul, hubiera creído que me había transportando a otra galaxia. Dunas. Nos adentramos en las huellas hacia el campo Piedra Pómez creado por la lava esponjosa del Volcán Blanco que luego se petrificó. ¡Lava blanca! El Campo de Piedra Pómez te deja con la boca abierta. Tiene 75.489 hectáreas y es un paisaje único en el mundo. Imaginen Talampaya pero en blanco.
Nos quedamos un buen rato caminando por las elevaciones del terreno, sacando fotos y disfrutando del silencio. Por suerte no había viento. Es un sitio de película.
Comimos algo y emprendimos el regreso. En total la excursión duró 12 horas. Compré empanadas en Nicole, El rincón de la pizza (calle Lavalle frente a la rotisería) para cenar. Probé empanadas de mondongo.
El Shincal
Al día siguiente me libré de pagar un tour. ¡Por fin! Fui a la terminal para tomar la combi de las 10 hs a El Shincal, una ciudad inca en Londres. La combi sale $15 y te deja a una cuadra de la entrada del sitio arqueológico, aprox. La combi funciona de lunes a sábado aunque no tiene los mismos horarios todos los días. Es un recorrido corto así que en media hora estaba entrando en las ruinas y esperando el comienzo de la visita guiada.
El shincal de Quimivil formó parte del imperio inca como capital administrativa y enclave estratégico entre 1470 y 1536. No es Machu Picchu, pero hay algunos restos muy interesantes como «las escaleras al cielo» (escalinatas a colinas convertidas artificialmente en plataformas para el culto solar y lunar) y el «kallanka» o depósito. ¿Por qué ahora se llama el Shincal (no sabemos el nombre original de la ciudad)? Porque cuando el sitio fue descubierto por los arqueólogos, estaba cubierto de shinquis, un pequeño árbol que, ocultándolo, preservó el sitio.
Sinceramente no sabía que había un lugar así en Argentina. Uno sólo puede adivinar la magnitud de lo que habrá sido dominando los cerros de la región. Si les interesa la arqueología, pueden sumar El Shincal al pucará de Tilcara y a las ruinas de los Quilmes. Es impresionante. Si van a la primera visita guiada de la mañana pueden subir a lo que suponen fue un templo solar. Todo es impresionante.
Después visité el museo. Chico pero bueno y claro.
Una vez visitado el museo y habiendo recorrido todo el sitio, decidí ir a conocer Londres, el pueblo a 5 o 6 kms de las ruinas (llamado así en honor al casamiento entre María Tudor y Felipe II en 1553… todos sabemos cómo terminó la cosa). Pero la combi volvía a eso de las 17hs y no hay otro colectivo hasta el centro de Londres de la Nueva Inglaterra. Me fijé si alguien me llevaba pero nada. Empecé a caminar. Y caminar. Otra gente que también caminaba se detuvo en el camino para almorzar pizza, pero yo quería algo más suculento. Seguí caminando. Justo una familia detuvo el auto para recoger un cardón. Les pedí si me llevaban y me acercaron a la plaza principal de Londres. Igual anduve bastante.
Almorcé en el bar La Plaza un locro riquísimo, sobre la ruta 40 y frente a la plaza. Luego visité la oficina de turismo que tenía productos regionales y la iglesia San Juan Bautista. Di una vuelta y me quedé charlando en la plaza con otros turistas a la espera de la combi de regreso que para frente a la plaza y que casi perdemos.
Uno puede hospedarse en Londres, aunque es mucho más chico que Belén. Está la posibilidad de recorrer la ruta del telar (hay ocho artesanos textiles), la finca San Isidro con su producción de nuez y frutales –Londres es la cuna de la nuez-, el balneario del camping El Molino y la iglesia La Inmaculada Concepción. Yo no pude hacer todo al no tener auto.
De regreso en Belén fui a visitar el taller de Las Arañitas Hilanderas, una cooperativa textil, y después la iglesia de Belén.
Más tarde, por única vez en Belén cené en un restaurant importante (para pagar con tarjeta). Fui al restaurant del hotel Belén, Mikhuy y comí sorrentinos de cabrito.
Nuevo día en Belén. Decidí subir al cerro de la Virgen. Ahí no se les ocurrió poner un funicular. Hay que subir paso a paso al santuario y monumento «Nuestra Señora de Belén» para tener una vista panorámica de la ciudad. Me llevó su tiempo llegar pero al final lo hice y valió la pena. Hermoso lugar donde sacar fotos.
Bajé y compré empanadas fritas en la rotisería de Pollo Crak-Crak, único lugar abierto a esa hora del domingo. Me duché porque había transpirado de lo lindo y a eso de las cuatro de la tarde me encontré con una familia que había conocido en la cima del cerro. Ellos me llevaron en auto al predio ferial donde se celebraba la Fiesta del Poncho. Tomé allá un licuado de frutillas y compré algunas cosas (papines, nueces confitadas, etc).
A la noche quería cenar jigote, plato típico de la zona pero los restaurantes abren tarde y en Mikhuy no tienen comidas regionales. Fui a hablar a la oficina de turismo para que me aconsejaran (muy copada la gente de la oficina de turismo de Belén) y me dijeron que me convenía ir a la Fiesta del Poncho. ¡Otra vez! Eran 20 cuadras de caminata. Iba a ir en taxi cuando escuché que a la pareja que estaba preguntando dónde comprar artesanías le aconsejaron lo mismo que a mí. Les pedí acompañarlos así que fui de nuevo al predio ferial. Compré el jigote y lo comí ahí nomás. Ellos volvieron enseguida porque ya no quedaban artesanías. El jigote es muy rico, es como una lasaña bien sabrosa.
Mi último día en Belén. Fui al museo arqueológico Cóndor Huasi. Son dos salas en una galería. Deberían darle su propio edificio. Uno sin escaleras. Hay algunas piezas realmente bellas. Escudillas y vasos decorados de la Cultura Aguada, vasos modelados de la cultura Condor Huasi, hachas ceremoniales de piedra, máscaras, joyería de oro, alfileres de hueso, etc.
Como me quedaba algún tiempo para tomar el micro, caminé un rato sin rumbo fijo. No almorcé. A las 13 salí en el bus 25 de agosto hacia San Fernando del Valle de Catamarca. Me iba a la capital.
¿Qué me quedó pendiente? Conocer Hualfín, la mina de rodocrocita en Andalgalá (Minas Capillitas), cuesta de Capillitas, el pucará de Aconquija…
DATOS:
Hotel María del Rey. Es un hotel nuevo aún sin cartel. Está ubicado en Av. Gdor Cubas entre Mitre y Roca. Al lado de una lavandería. Mis amigos se quedaron allí y les gustó. 03835-461174/ 03835-15528572
Secundino Vazquez (nativo de Antofagasta) whatsapp: +5493835524536 / +5493835435075
El Peñón: Hospedaje. Hostería de altura (más costoso), Hostel Soriano, etc. No son muchos pero hay tres o cuatro hospedajes más y casas de familia. Entre los vaqueanos pueden llamar a Mario López, Tomás Soriano (03835-453001) y Sandro Vazquez entre otros. Se pueden realizar caminatas, cabalgatas y tours en 4×4. No es conveniente ir en invierno ya que por la noche el frío es extremo. La electricidad se conecta de noche con un generador.
Sitios de atracción turística cerca de El Peñón: Campo Piedra Pómez (5.000 formaciones rocosas, algunas de 50 mts de altura), Volcán Blanco, Laguna Purulla (lugar de anidación de parinas grandes), Carachi Pampa, Laguna Grande (en verano se encuentran más de 15.000 parinas chicas o flamencos), El Peinado (laguna y volcán), El Mirador, Fumarolas del Volcán Galán, Laguna Diamante, Vertientes de agua de riego, Cerro de la Cruz, Cerro del Pato, Mirador Virgen de la Peña, Peñas Chicas, Lagunita Verde, Ciénaga Grande y La Lomita, Lagunita del Arriero. Está prohibido acampar y circular por huellas no habilitadas.
Combi El Cóndor a El Shincal (lunes a sábado): 7:45, 10, 12, 19 y 21hs sale de Belén. Sale de El Shincal a las 8:15, 10:30, 17:30, 19:30 y 21:30. Belén-Londres (lunes a viernes): 6:40, 7:45, 9, 10, 11:20, 12:15, 13:20, 14hs (horario escolar). Regresa a las 7:10, 9:30, 11:45 y 13hs.
En Londres se pueden realizar caminatas. Pregunten a los teléfonos: 3834-987168, 3835-699236.
TRANSPORTES DESDE Y HACIA BELÉN
Empresa 25 de agosto:
a la ciudad de Catamarca a las 13, a las 18 y a las 2am. Vuelven a las 12:30, 19 y 6am. Son unas cinco horas. Todos los micros a la capital pasan por Aimogasta (La Rioja).
Empresa El Antofagasteño:
a la ciudad de Catamarca (lunes a viernes) a las 2am, lunes y viernes a las 19 (martes, jueves y sábado no hay servicio a las 19hs). De Catamarca a Belén domingo a viernes a las 19:30 (menos los miércoles), lunes a las 13 y miércoles & viernes a las 6:15. Es bastante caótico.
Belén a Laguna Blanca los domingos a las 18, lunes, miércoles y viernes a las 12.
Belén a Antofagasta de la Sierra los miércoles y viernes a las 12. Tarda 8 horas y es una catramina. Imaginen viajar 8 horas en el 60.
Sierras de Córdoba:
Belén a Aimogasta, Catamarca, Córdoba y Retiro los días domingos, martes y jueves a las 13:30.
Otras empresas:
Belén a Andalgalá. Lunes a las 7hs (regresa 11:30), viernes a las 18 (combi). De Andalgalá a Belén los jueves a las 14 y los sábados a las 9 (combi).
De Belén a Hualfín los lunes 13:30, viernes 12:20 y sábados 12:20.
De Belén a Santa María: lunes 13:30 y 20, martes a las 20, jueves a las 6am, viernes a las 20, sábados 12:20 y domingos (y feriados) 17:15. No hay servicio los miércoles.
¿Cómo fui finalmente de Chilecito a Tinogasta? Me levanté a las 5:30 y tomé un taxi a la terminal. Tenía que tomar el micro de las 7:30 a La Rioja. Viajé con la empresa 20 de Mayo ($180). Salimos puntuales y, aunque me congelé (ya saben, porque no ponen calefacción y no hay abrigo que baste), llegamos antes de lo que pensaba. Por suerte arribamos a las 10, no sé si hubiera podido hacer las combinaciones que esperaba si aparecía más tarde. Llegué a la terminal de La Rioja y tomé el micro de la empresa Facundo (la odio: es la peor empresa de transportes, uno no sabe si va a llegar vivo) que salía 10:30 hacia Aimogasta. Ahí terminé de congelarme. Llegué tiritando a Aimogasta a las 13hs. Corrí a la ventanilla de la empresa Gutierrez para asegurarme el último viaje. Casi me muero cuando la señora me dijo que ya no había lugar!!!! Al final llamó por teléfono y resultó que habían enviado un micro más grande así que pude comprar el pasaje para las 15:25 ($140). En total gasté $430 para hacer un trayecto que originalmente es de 140km. Faltaban unas dos horas pero con la valija y el frío que traía encima no me dio para salir de la terminal. Fui a la confitería y me senté al lado (casi encima) de la estufa eléctrica. Me sentía tan descompuesta del frío que no quise comer. Apenas le pedí un café con leche para tomar algo caliente. Si insisto con el tema del frío es porque justo fue en la fecha de la ola polar en Argentina. Y estar horas quieta no ayuda.
Salimos casi puntuales hacia Tinogasta, pero nos atrasamos porque la Gendarmería nos detuvo un buen rato. Gracias a una mujer que se quejó y a que Gutierrez no es tan trucha como las otras empresas, pusieron la calefacción y tuve un viaje agradable.
Llegué a Tinogasta pasadas las 17:30. ¡Un día perdido!
Resumiendo. Opciones de Chilecito a Tinogasta (o Fiambalá):
Directo a las 4am martes y domingos por Andesmar.
La versión que yo hice. Micro a La Rioja, luego a Aimogasta y finalmente a Tinogasta.
Hay otra opción, claro, pero no quería llegar muy de noche a Tinogasta.
Micro a La Rioja y bus de Robledo que va directo a Tinogasta los días lunes, miércoles y viernes a las 19:40.
Sin son varios les recomiendo que paguen un taxi entre todos o hagan dedo.
Laguna Verde
Bueno, llegué a la terminal de Tinogasta y un matrimonio que había conocido esperando el micro en Aimogasta me acompañó hasta la esquina del hostal. Es muy cerca. Me hospedé en el Hostal Santé. Una buena elección porque está bien ubicado y tiene todas las comodidades necesarias, incluyendo una cocina completa. Wifi, televisor en la habitación, ducha caliente… Acaso lo único más flojo es que la calefacción no era suficiente para el cuarto, pero estaba bien. Además en la cocina tenían una estufa a leña que era impresionante.
Fui a la oficina de turismo en la plaza principal (que no me informó nada ni me dieron un mapa), organicé un tour para el día siguiente y pasé por un supermercado donde compré fideos, atún en lata y salsa para prepararme la cena. Estaba cansada y quería comer temprano para acostarme. Pero los restaurantes – que no son muchos – abren tarde. Así que me cociné en el hostal y ahorré plata.
Al día siguiente fui con dos chicos del Chaco que se hospedaban en mi hostal a la excursión de Los Seismiles con la empresa Tinogasta Aventura. El guía se llama Juan Roger y es alguien que hace las cosas en serio. Salimos 7:30 porque según el guía es mejor salir temprano ya que hay menos viento. Fuimos parando en el camino para no apunarnos. Para comer nos dio a cada uno una bolsita de nueces y pasas de uva. No hay que comer mucho y menos cosas saladas. Lo mejor son las frutas, cereales y granos.
Paramos primero con los primeros rayos del amanecer en las montañas, luz dorada y única. Luego en un puesto y en el cartel de Los Seismiles. En el refugio Nº4 donde entramos un rato y en otros puntos panorámicos de la ruta. Finalmente llegamos al Paso de San Francisco (que lleva a Chile). Allí se ven tres volcanes monumentales: el Incahuasi o Casa del Inca (6.638 mts), El Muerto (6.486 mts) y el extinto San Francisco (6.016 mts). No lejos de ahí, aunque no visible, está el volcán más alto del mundo: el Nevado Ojos del Salado, de 6.891 mts (casi de la altura del cerro Aconcagua).
Nos sacamos fotos en el paso y nos metimos con la 4×4 hasta las orillas de la Laguna Verde. La laguna está a 4.100 mts así que hay que moverse con cuidado para no apunarse. Como es una salina, el agua no termina de congelarse. En verano dicen que hay flamencos. Hermoso!!!
Complejo Cortaderas
Emprendimos el descenso. También paramos para sacar fotos si el lugar lo ameritaba. Vimos muchas vicuñas que se cruzaban por el camino. Paramos unos minutos en el hotel Cortaderas al lado de una laguna. Pudimos ver a lo lejos algunos flamencos que no habían migrado a zonas más cálidas. Seguimos por la ruta 60. Llegamos a la Quebrada Las Angosturas siempre bordeando el río Guanchin. Una quebrada de piedras rojas salidas de Talampaya o de alguna película. Tan bello que parecía sobrenatural.
La cereza del postre fueron un cerro de tantos colores que no pude contarlos (no sé si tiene nombre) y un cerro coronado de «castillos» que parecía la columna vertebral de un gigante. Pasamos por Fiambalá y volvimos al hostal.
Tenía hambre así que fui a la plaza pero no había ningún lugar abierto porque era la hora de la siesta. El único sitio abierto era la heladería Grido. Por suerte hacía calor de modo que almorcé-merendé helado. Luego me encontré en la plaza con los chicos con los que había compartido la excursión. Nos quedamos charlando. A la noche cenamos en Alma de Adobe un lomito al plato. Tardaron muchísimo en atendernos. Nada especial la comida.
Al otro día, por la mañana, salí a pasear un poco por el centro de Tinogasta. Pasé por la iglesia, un centro de artesanías y productos regionales «Feria permanente de productores tinogasteños» que abre sólo de mañana (calle Presidente Perón entre Rivadavia y Villafañez) y el pequeño museo arqueológico Tulio Robaudi con momias incluidas.
En una carnicería frente a la plaza (calle Moreno) – «Carnicería Nicolás» – compré unos churrascos y una morcilla para prepararme en el hostal. Juro que jamás probé una morcilla semejante. Nada de grasa. Riquísima. Me hubiera comprado kilos si no fuera que no tenía manera de traerlos. No tiene comparación. La hice a la plancha junto con uno de los bifes. Quedó deliciosa.
Para la tarde había contratado con Jaled Cabur, el dueño del hostal, una excursión a la Ruta del Adobe y Fiambalá. Fuimos los mismos que a la excursión anterior junto a una escritora que se sumó al mediodía. Salimos pasadas las 14hs.
La Ruta del Adobe es uno de los principales atractivos de la zona y puede hacerse tranquilamente en auto (si uno tiene auto, claro).
Empezamos visitando el Oratorio de los Orquera, una capilla privada del siglo XVIII ubicada en El Puesto. Luego fuimos a la iglesia Nuestra Señora de Andacollo en el paraje de La Falda. Es una iglesia del siglo XIX de estilo neoclásico. Después entramos a la Capilla Nuestra Señora del Rosario (1712) en el mayorazgo de Anillaco: la iglesia más antigua de la provincia y la poseedora de uno de los retablos más impactantes que vi. Un retablo de barro impresionante.
Pasamos por las ruinas del poblado prehispánico de Watungasta pero no entramos porque no parece haber mucho para ver. O se necesitan más excavaciones o un trabajo de restauración, no sé.
No visitamos ni la iglesia de San Pedro (1770) en Fiambalá ni la Comandancia de Armas ya que Jaled prefirió llevarnos a la Duna Mágica. Todos estuvimos de acuerdo con su elección. Después de una parada técnica en Fiambalá (hay unos baños públicos en la plaza principal) seguimos hasta Saujil donde está ubicada esta duna de 78 mts de alto. Allí se practica sandboarding. Nosotros subimos con esfuerzo a la duna y nos quedamos un rato arriba disfrutando del paisaje. Luego bajamos sin tanta emoción porque para deslizarse es necesario llevar una tabla…. y nosotros no teníamos ninguna. Si tienen la oportunidad de ir, alquilen o lleven una tabla para usarla de trineo.
Finalmente llegamos a las Termas de Fiambalá. Yo no había llevado traje de baño (y ahí no alquilan) así que pagué la mitad de la entrada. En vez de meterme al agua caminé hasta uno de los miradores donde observé el atardecer entre las montañas. Había otro mirador más lejano pero ya se estaba haciendo de noche. Es una linda terma si les gustan las termas. El complejo tiene varias piletas de diferentes temperaturas. Más arriba en la montaña el agua es más caliente.
Aunque no fui, está también el complejo termal de La Aguadita (no tan comercial). Es más barato y más cerca de Tinogasta. Asimismo, si les gustan las dunas, pueden visitar las dunas de Tatón con la inmensa duna Federico Kirbus de 1230 mts (la más alta del mundo), a la cual se accede desde Medanitos.
A la noche me preparé en el hostal el otro churrasco con una ensalada de tomate y cebolla que había comprado en la feria regional.
Al día siguiente tenía que madrugar para viajar a Belén. El único bus directo sale a las 6 de la mañana con la empresa Robledo.
¿Qué me quedó pendiente? Hacer la excursión al Balcón del Pissis, otro volcán de gran altura (el segundo del mundo, justo detrás de Ojos del Salado). Aunque Tinogasta me gustó, creo que la próxima vez que viaje me hospedaré en Fiambalá para conocer algo distinto. Por otro lado me hubiera gustado ir a las minas de Vill Achay, una mina de estaño – si bien es un recorrido que aún no ofrecen los guías.
En Tinogasta me recomendaron también el hotel Nicolás: Presidente Perón 231 (03837-420028) gerencianicolashotel@hotmail.com.ar Escuché rumores que podía cerrar así que llamen antes de ir.
Tinogasta Aventura. Guía Juan Antonio Roger: Moreno 413 (03837-421056). tinogastaaventura@gmail.com +5493837524901
Si quieren realizar alguna caminata por los alrededores de Tinogasta con un arqueólogo, pueden llamar a Tulio: +5493837471346. Yo no pude hacerlo porque justo se le había roto el auto.
Pueden comprar productos regionales en Sumaj Pachay: San Martín 1223. Les aconsejo comprar aceitunas La Tinogasteña. Tienen de distinto tipo, como las triple cero que son enormes. En El Puesto pueden ir al Regionales El Oratorio. Al lado hay un camping.
Si quieren souvenirs distintos, vayan al Atelier de la Maga. En algunos sitios de Tinogasta también venden sus cosas. Yo compré un imán precioso.
El supermercado Delfín está en Rivadavia 250, frente a la plaza principal.
La entrada a las termas de Fiambalá sale $100. Tienen piletas entre 24º y 48º. Hay cabañas, hostería, camping, etc. Alquilar una bata sale otros $100.
En Tinogasta también hay varias bodegas que pueden visitar.
Todos los puntos de la Ruta del adobe en la municipalidad de Tinogasta: iglesia de San Buenaventura (1847, Cerro Negro), iglesia de Nuestra Señora de las Mercedes (1786, Los Quinteros), iglesia de Santa Lucía (1850, Los Quinteros), Capellanía Copacabana (siglo XVIII, Copacabana), casa de José V. Figueroa (1850, La Puntilla), Casa Grande (1897, Tinogasta), Centro Cultural Municipal (1899, Tinogasta), oratorio de los Orquera (1740, El Puesto), iglesia de la Virgen de Andacollo (1750, La Falda), iglesia Nuestra Señora del Rosario (1712, Anillaco), ruinas de Watungasta (anterior a la llegada de los incas en 1470).
¿Comer en Tinogasta? Si los encuentran abiertos pueden ir al Resto Bar Los Palacios, Alma de Adobe -ambos alrededor de la plaza-, el comedor El Centenario (al lado de la feria) y/o las rotiserías Liliana (Copiacó 178), El buen gusto (Rivadavia 121) y La Criollita (Rivadavia 670).